Por: Carlos Giribay
El marketing es una herramienta poderosa para conectar con las personas que comparten intereses, valores y necesidades hoy en dia. Una de las formas más efectivas de hacerlo es creando comunidades digitales, es decir, grupos de usuarios que interactúan entre sí a través de plataformas online, como redes sociales, foros, blogs, podcast etc.
Estos ofrecen varios beneficios tanto para los creadores de contenido como para los consumidores. Por un lado, las marcas pueden generar confianza, lealtad y engagement con sus clientes, así como obtener feedback, insights y datos valiosos para mejorar sus productos y servicios. Por otro lado, los consumidores pueden encontrar soluciones, información y entretenimiento, así como expresar sus opiniones, experiencias y emociones.
Pero crear una comunidad digital no es una tarea fácil. Requiere de una estrategia de marketing bien definida y ejecutada, que tenga en cuenta los siguientes argumentos basados en que quieres que la comunidad vea de ti o de tu marca:
- Definición en el objetivo y el público objetivo de la comunidad. ¿Qué queremos lograr con la comunidad? ¿A quién queremos dirigirnos? ¿Qué necesidades, problemas o intereses tienen nuestros potenciales miembros?
- Elección de la plataforma adecuada para la comunidad. ¿Dónde se encuentran nuestros usuarios? ¿Qué tipo de contenido consumen? ¿Qué nivel de interacción esperan? Podemos optar por crear nuestra propia plataforma o usar una existente, como Facebook, Twitter, Instagram, LinkedIn, etc.
- Creación de contenido con valor para la comunidad. ¿Qué podemos ofrecer a nuestros usuarios que les aporte valor? ¿Qué tipo de contenido les interesa, informa, educa o entretiene? ¿Con qué frecuencia y formato lo vamos a publicar? El contenido debe ser relevante, original y de calidad, y debe generar conversación y participación.
- Moderación directa de la comunidad. ¿Cómo vamos a gestionar las interacciones entre los usuarios? ¿Qué normas y criterios vamos a establecer? ¿Cómo vamos a resolver los conflictos o las dudas que surjan? Es importante mantener un tono cordial y respetuoso, fomentar el diálogo y el feedback, reconocer las aportaciones de los usuarios y premiar su fidelidad.
- Medición y analizar los resultados de la comunidad. ¿Cómo vamos a evaluar el éxito de la comunidad? ¿Qué indicadores vamos a usar? ¿Qué herramientas vamos a emplear? Es fundamental medir el rendimiento de la comunidad en términos de alcance, engagement, satisfacción, retención y conversión, y usar los datos para optimizar la estrategia.
Crear una comunidad digital es un proceso que requiere tiempo, esfuerzo y creatividad. Pero si lo hacemos bien, podemos obtener grandes beneficios para nuestra marca y para nuestro cliente objetivo que busca conectar con nosotros. Aquí es donde entra la lealtad
El público es un factor clave para el éxito de cualquier comunidad digital. Una comunidad leal es aquella que participa activamente, comparte contenido, recomienda la marca y genera confianza. Pero ¿cómo se puede mejorar la lealtad del público dentro de una comunidad digital?
Debes saber quiénes son tus miembros, qué les interesa, qué necesitan y qué esperan de ti. Puedes usar herramientas como encuestas, análisis de datos, entrevistas o focus groups para obtener esta información. Así podrás ofrecerles contenido relevante, personalizado y de valor; lo cual nos llevara a tener una propuesta de valor única. Tu comunidad debe tener un propósito claro y diferenciador que atraiga y retenga a tu público comunicando cuál es el beneficio de pertenecer a tu comunidad, qué te hace diferente de otras opciones y qué puedes ofrecerles que nadie más pueda. Tu propuesta de valor debe ser coherente con tu identidad de marca y con tu audiencia.
Muchas veces esto se vuelve un básico de la mercadotecnia en términos de comunicación directa, pero el crear interacción y feedback, la comunidad leal se pronunciará como comunidad activa.
Para mantener el interés y la participación de tu público, debes generar espacios de diálogo, colaboración y retroalimentación. Puedes usar redes sociales, foros, blogs, webinars, podcasts o eventos para crear conversaciones con tu comunidad. También debes responder a sus comentarios, preguntas y sugerencias, y mostrarles que valoras su opinión.
Cuando se empieza a percibir la existencia de una cultura en la comunidad finalmente, ten en cuenta que, para mejorar la lealtad de tu público dentro de una comunidad digital, debes crear una cultura de comunidad que refleje tus valores, principios y objetivos conectados a ellos. Debes transmitir una visión compartida, una misión inspiradora y unos valores alineados con los de tu audiencia. Debes fomentar el sentido de pertenencia, la confianza y el compromiso entre tus miembros. Y debes celebrar los logros, los aprendizajes y las experiencias que vives con tu comunidad.
Como ejemplo enfocado a nuestra región en términos de comunidades digitales; en Latinoamérica son un fenómeno social y cultural que ha cobrado relevancia en los últimos años. Estas comunidades se caracterizan por su diversidad, creatividad, colaboración y participación en la construcción de contenidos que hablan sobre sus problemáticas internas y como atacan cada país estos retos socialmente.
Según un informe de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL), el número de usuarios de internet en Latinoamérica pasó de 384 millones en 2015 a 465 millones en 2019, lo que representa un 66% de la población total. Asimismo, el número de suscripciones a servicios móviles de banda ancha se incrementó de 226 millones a 397 millones en el mismo período, lo que implica una tasa de penetración del 60%. Estos datos muestran el potencial de las comunidades digitales para generar impacto social, económico y cultural en Latinoamérica.
Conectando esto con un estudio de la consultora Comscore, las redes sociales más populares en Latinoamérica en 2020 fueron Facebook, YouTube, WhatsApp e Instagram, con un alcance promedio del 97%, 94%, 93% y 83% respectivamente. Estas plataformas son utilizadas por las comunidades digitales para comunicarse, compartir contenidos, expresar opiniones y crear vínculos. Otras plataformas emergentes son TikTok, Telegram y Clubhouse, que han ganado usuarios en los últimos meses por ofrecer formatos innovadores y atractivos.
En conclusión, las comunidades digitales son un fenómeno social que ha cobrado relevancia en los últimos años, especialmente debido a la pandemia de COVID-19 que limito las interacciones presenciales. Estas comunidades hoy en día ofrecen beneficios como el acceso a información, la creación de redes de apoyo, la expresión de la identidad y la participación ciudadana. Sin embargo, también implican desafíos como la brecha digital, la desinformación, la polarización y la violencia en línea. Por ello, es importante que los usuarios de las comunidades digitales sean conscientes de sus derechos y responsabilidades, así como de las oportunidades y riesgos que conlleva su participación en estos espacios virtuales llenos de potenciales creadores de ideas.
Por: Carlos Giribay